De mis 39 años, los últimos 9 se los he dedicado al vino: vino como placer y para descubrir buenos acompañamientos con la comida, y no vino como la acción instintiva de ingerir una bebida o como el vicio de tomármelos todos hasta caer. ¿Borracho hasta el amanecer? No, el vino no es para eso. Las primeras copas que recuerdo fueron de vino de caja y la primera cepa, cuando me pasé a la botella, fue la Cabernet Sauvignon. Es decir, como la mayoría de aficionados al vino en Colombia, comencé al revés: por la cepa más potente, y no como lo sugieren los expertos: primero los blancos, luego la Pinot Noir y luego los demás tintos según su nivel de astringencia.
¿Enólogo? No ¿Sommelier? Tampoco ¿Enófilo? Sí, pero la palabra no me gusta. Me acomodo más con Periodista de vinos, porque reúne dos actividades que me apasionan.
El vino entonces lo descubrí en caja, pero el placer por tener una botella al menos cada semana y las ganas de aprender me llegaron por dos hechos claves en mi profesión: un viaje a las regiones vitivinicultoras argentinas, en abril de 2008, con visitas a una veintena de bodegas productoras, y las catas de vinos celebradas por GENTE, el periódico que circula en barrios de Medellín y Envigado, y del que soy editor.
En esta primera entrega al Gourmet Urbano, quiero compartir con ustedes una entrevista muy especial.
A José Alberto Zuccardi lo conocí por sus vinos y también por referencias en mi viaje a Argentina. Unos compañeros que lo visitaron en su bodega, en Mendoza, y que la recorrieron con él como guía, me contaron que tiene tanto poder y conocimiento como simpatía y buenos dotes de anfitrión. En Expovinos 2009, Bogotá, conversamos 15 minutos: un rato corto, pero delicioso, una buena lección de gusto y saber.
¿Qué pasa con el vino? ¿Por qué lo conocemos, lo bebemos y nunca lo queremos dejar?
“El vino es amigable: cuando hay una botella en la mesa, siempre hay una conversación en torno al país, a la región, a la cepa, a la elaboración. El vino, además, es compartir: cuando alguien abre su mejor botella, no se la querrá tomar solo. Es un hecho social, rompe el hielo entre las personas, genera un espíritu amistoso. Y todo esto ocurre no por el alcohol, porque el contenido de las bebidas espirituosas es más alto, pero no generan tal comunicación”.
Una pregunta que muchos se hacen: ¿Cómo se consigue entender de vinos?
“El vino lejos de ser un hecho intelectual es un hecho sensorial, lo importante no es cuánto sabe la persona. Saber permite entender las variedades, las regiones, los estilos. Pero es un hecho sensorial y por eso el mejor vino del mundo es el que más te guste. Para beberlo no hay que saber, hay que sentir. Los que trabajamos en el mundo del vino tenemos que saber, para los demás basta disfrutarlo”.
¿Qué le aporta Argentina al mundo del vino?
“Es una mezcla de nuevo y viejo mundo. Argentina, y por supuesto los vinos de Zuccardi, reúnen la concentración del Nuevo Mundo y la elegancia del Viejo Mundo. En la bodega estamos cultivando 35 variedades que trajimos de Europa y que no existían en Argentina. Cada cepa tiene una expresión particular según el terroir, y es lo que queremos descubrir”.
¿Cómo enfrentan los enólogos los retos del calentamiento global?
“Nos preocupa. Estamos en Mendoza, donde cultivamos solo 5.000 kilómetros cuadrados de los 150.000 que tenemos de territorio y donde todo necesita ser irrigado. Entonces los niveles de nieve son importantes porque irrigamos con el deshielo de Los Andes. Cualquier cambio climático afecta los cultivos, 2 o 3 grados de temperatura implican la posibilidad o la imposibilidad de cultivar determinada cepa. Es una preocupación, pero no tenemos certezas de lo que ocurrirá”.
¿Cuáles son las cepas favoritas de José Alberto Zuccardi? ¿Qué nos recomienda beber?
“Amo la diversidad y me gusta experimentar con variedades. La Tempranillo me encanta, fuimos la primera bodega en elaborarla en Argentina entonces me genera afecto, y también me gusta laViognier”.
Espero que esta breve pero enriquecedora entrevista sea del agrado de todos, así como el resto de experiencias, recuerdos, hechos, ilusiones y sensaciones que comenzaré a compartir con ustedes.
¡Hasta la próxima!
Juan Felipe Quintero
Periodista de Vinos
No hay comentarios. :
Publicar un comentario