Después de cuatro años de trabajo en el exterior, el barista Dayne Levinrad volvió Johannesburgo, la ciudad más grande y poblada de Sudamérica, y empezó desarrollar este invento tras varias pruebas fallidas. Se trata de un cono de helado o cucurucho, como suele llamarse en diversos países, recubierto en el interior con cuatro capas de chocolate.
Según los empleados, solamente se tienen 10 minutos para beberlo antes de que el chocolate comience a fundirse. Sin embargo, este breve período de tiempo no les impide a quienes vayan a la cafetería de tomarse su tiempo para subir la foto en Instagram y Snapchat. En Instagram se han subido ya más de 1100 publicaciones con el tag #coffeinacone, que fue creado por el mismo Dayne Levinard.
Coloca en un recipiente apto para microondas una taza de chispas de chocolate junto con una cucharadita de aceite de coco. Deja fundir el chocolate durante unos segundos y pincela la parte inferior del cono. Puedes colocar un malvavisco en el interior para que sirva de tapón y no se caiga el café. Lleva al refrigerador y cuando el chocolate esté seco, vierte el café y la espuma de la leche que se forma al hervirla, o bien, agrega una cucharada de crema montada.
Esperamos que esta tendencia llegue a todas las ciudades del mundo, pues ¿hay combinación más sabrosa que el café y el chocolate? Según comenta el creador de este emprendimiento, el café en conos es un invento común y delicioso, que logró tener éxito en el instante, aunque no es para aquellos que toman su bebida caliente lentamente.
Fuente: Placer al plato
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