Siempre recomendamos hacer cocciones en utensilios de hierro, de acero inoxidable o los cerámicos, todos ellos son materiales muy naturales en los que cocinar. Cuando por el tipo de alimento o por comodidad a la hora de cocinar se requiere de otro material, sin duda recomendamos los utensilios antiadherentes, nunca de silicona.
Esa teoría aplica también en el caso de querer hacer repostería, ya sea con tartas dulces o saladas. Preferimos sin duda los moldes antiadherentes o los cerámicos a los de silicona.
¿Qué ventajas tienen los moldes antiadherentes frente a los de silicona?
- Homogeneidad en la cocción: los moldes antiadherentes tienen un cuerpo muy bien fabricado, y en su diseño se hace especial énfasis en la construcción de un molde que reparta muy bien el calor, de forma que se consiga una cocción eficaz y homogénea de las recetas. Los moldes antiadherentes de Le Creuset, por ejemplo, tienen un interior de hierro, que coge muchísima temperatura y consigue una cocción fabulosa; o los moldes antiadherentes Nordic Ware, sin ir más lejos, tienen un cuerpo de aluminio con recubrimiento antiadherente, y en esas capas interiores hay una eficacia en el reparto de la temperatura realmente elevada.
- El resultado de la cocción: con un molde de silicona nunca conseguirás una cocción tan buena de la corteza como en un molde cerámico o uno antiadherente, dado a cómo estos últimos materiales radian el calor hacia la masa.
- Los moldes de silicona pueden dejar sabor en los alimentos que cocinas, se aprecia el sabor sintético del material en el que has cocinado. Eso es más que contrastable, y de hecho es una de las características más comentadas y negativas por parte de los usuarios de los moldes de silicona. Por contra, los moldes cerámicos y los antiadherentes no dejan ningún sabor en las recetas -las recetas saben como debieran.
- Los moldes de silicona cogen olores, y con el tiempo van oliendo peor, dado que las bacterias (causantes del mal olor) se adhieren a la silicona.
- Por un tema de salud: en las cocciones de las recetas, y especialmente en repostería cocinando en el horno, se alcanzan temperaturas muy elevadas, y es con esas temperaturas extremas cuando los materiales se ven más dañados y sueltan elementos que resultan perjudiciales para la salud. La silicona (plástico), no es de los utensilios más saludables para cocinar.
Hoy en día, hay moldes antiadherentes y cerámicos que resultan de lo más duraderos y económicos.
Por todo lo comentado, creemos que vale mucho más la pena invertir en un molde cerámico o uno antiadherente que en uno de silicona. ¿Tú qué opinas? ¿En qué tipo de molde te gusta cocinar?
Fuente: Claudia and Julia
No hay comentarios. :
Publicar un comentario