Los cereales integrales son geniales para acelerar el metabolismo. / ANDREA PIACQUADIO / PEXELS |
La alimentación es clave para acelerar el metabolismo y los cereales integrales son la mejor elección.
No es ningún secreto: una de las claves para perder peso y quemar grasas está en acelerar el metabolismo. Esto se consigue a través de diferentes vías y una de las principales es seguir una dieta adecuada y elegir bien los alimentos. Y, según muestra la ciencia, los cereales integrales es la elección perfecta.
Los estudios sugieren que apostar por los granos integrales en lugar de por los granos refinados en la dieta aumenta la pérdida de calorías al reducir las calorías retenidas durante la digestión y acelerar el metabolismo. Los estudios epidemiológicos han sugerido beneficios para la salud de los cereales integrales y el alto consumo de fibra dietética, incluso para el control glucémico y la sensibilidad a la insulina. Sin embargo, ha habido controversia acerca de si los cereales integrales y la fibra son beneficiosos para la regulación del peso. Pero eso ya está completamente superado.
Demostrado científicamente
Un estudio de 2017 ya arrojó claves extraordinarias. Muchos trabajos anteriores habían sugerido los beneficios de los cereales integrales y la fibra dietética sobre el riesgo de enfermedades crónicas. Este estudio ayudó a cuantificar cómo funcionan los granos integrales y la fibra para beneficiar el control del peso y dio credibilidad a la relación del consumo de granos integrales y fibra con un menor peso corporal y mejor salud.
Las personas que consumieron una dieta con granos integrales que coincidía con la cantidad diaria recomendada de fibra perdieron cerca de 100 calorías adicionales por día debido a una combinación de mayor tasa metabólica en reposo y mayores deposiciones en comparación con las personas que comieron granos refinados sin mucha fibra. Las calorías adicionales perdidas por aquellos que tomaron granos integrales fueron equivalentes a una caminata rápida de 30 minutos.
La tasa metabólica
A lo largo de las ocho semanas que duró el estudio, los investigadores midieron el peso, la tasa metabólica, la glucosa en sangre, las calorías, el hambre y la saciedad. Al final del trabajo, quienes comieron granos integrales tuvieron un aumento en la tasa metabólica en reposo en comparación con consumieron comieron granos refinados.
Los granos son un grupo importante de alimentos que incluyen productos de trigo, arroz, avena y cebada. Los cereales integrales incluyen la capa nutritiva exterior de los cereales y se encuentran en productos como la harina de trigo integral, la avena y el arroz integral. Los granos refinados son almidones que han sido procesados y descompuestos en una textura más fina, principalmente para aumentar la vida útil. Este proceso drena el almidón de fibra dietética, hierro y muchas formas de vitamina B. A través de un proceso de enriquecimiento, el hierro y las vitaminas B se pueden volver a agregar a los granos refinados, pero la fibra generalmente no se agrega. La harina blanca, el pan blanco y el arroz blanco son ejemplos de granos refinados.
Ciertos alimentos son más fáciles de digerir para tu cuerpo porque sus estructuras son menos complejas. Entre los tres tipos de carbohidratos (almidones, azúcares y fibra), los azúcares requieren muy poca digestión y se absorben casi de inmediato en el torrente sanguíneo para obtener energía. Los almidones tienen estructuras más complejas que requieren que tu cuerpo trabaje más para descomponerlos. La fibra afecta la velocidad de la digestión. Los cereales integrales se componen principalmente de fibra y almidón, lo que significa que tu cuerpo tiene que trabajar más para metabolizarlos. Ahí está el secreto de sus beneficios.
TAMARA VILA
Fuente: Mujer Hoy
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