Sin embargo, existen algunas investigaciones que han demostrado, que en ciertos casos, debes evitar el consumo de café, ya que en ellos si podría ser contraproducente para tu salud.
Descubre en qué 4 casos en los que no deberías tomar café nunca.
1. Cuando El Café Está Demasiado Caliente
Según el nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud, el consumo de bebidas calientes por encima de 65°C puede aumentar el riesgo de sufrir de cáncer de esófago. Esto es importante tenerlo en cuenta ya que, por ejemplo, la mayoría de restaurantes americanos sirven el café entre 62 y 79ºC.
Para bajar un poco la temperatura al café, puedes añadirle un chorrito de leche o crema, pero esto sólo ayudará a bajarlo 5 grados como mucho, así que la verdadera solución es ser un poco paciente. Una taza de café negro de 3o cl normalmente necesita de 5 minutos para enfriar a una temperatura segura para tu consumo.
2. Si Sufres De Ansiedad
Según Ali Miller, dietista registrada y muy conocida en Estados Unidos, la cafeína tiene un efecto estimulante sobre el sistema nervioso, ya que provoca la liberación del cortisol, conocida como la hormona del estrés. La liberación del cortisol, genera problemas de ansiedad y trastornos del sueño, especialmente en aquellas personas que sufren de trastornos de pánico y ansiedad social.
Para reducir la influencia de la cafeína en tu cuerpo, debes disminuir la ingesta del café. Para ello, puedes seguir las siguientes estrategias:
- Si tomas dos tazas al día, sólo tomar una preferiblemente 6 horas antes de acostarte.
- Toma café descafeinado.
- Mezclar un poquito de café con cafeína con un un poquito descafeinado.
- Prepararte una sola taza al día.
3. Cuando No Logras Concebir Bien El Sueño
El café puede parecer la solución natural para una noche que no quieras dormir mucho, pero sólo hasta cierto punto. Una investigación reciente halla que dormir 5 horas durante 3 noches consecutivas puede causar una disminución en el rendimiento cognitivo.
Por ello, si no logras dormir por lo menos 7 horas por la noche, omite el consumo de café por completo. En su lugar, toma una siesta de 20 minutos cuando tus niveles de energía estén bajos.
4. A Primerísima Hora De La Mañana
Ingerir una taza de café a las 6 a.m, no proporcionará ningún efecto positivo a tus niveles de energía. Esto es, porque en el primer par de horas después de despertar, tus niveles de la hormona del estrés cortiso, están en su punto más alto, lo cual te da un impulso de energía natural.
Por lo tanto, muchos expertos coinciden en que el mejor momento para tomar tu primera taza de café es de 10 a.m a 12 p.m., cuando los niveles de cortisol empiezan a bajar. De esa manera, aprovechas las ventajas de los niveles altos naturales del cortisol en tu cuerpo, y usas la cafeína cuando realmente la necesitas.
Si tomas tu taza de café muy temprano, es probable que necesites otra un par de horas más tarde para mantener el impulso y, dependiendo de tu historial de salud personal, tomar mucho café puede ser contraproducente, sobre todo si sufres de hipertensión arterial, diabetes o de reflujo gastroesofágico.
Referencia
Stephanie Eckelkamp. The 4 Times You Should Never Drink Coffee. Para Bicycling [Revisado en Noviembre de 2016]
Fuente: entrenamiento.com
Stephanie Eckelkamp. The 4 Times You Should Never Drink Coffee. Para Bicycling [Revisado en Noviembre de 2016]
Fuente: entrenamiento.com
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