El Gourmet Urbano: 🍷 #VINOS | Cinco consejos para elegir un buen vino estas navidades

jueves, 24 de diciembre de 2020

🍷 #VINOS | Cinco consejos para elegir un buen vino estas navidades

El menú, el número de comensales o el presupuesto influyen en la decisión. El sumiller Jesús Solanas recomienda dejarse asesorar y atreverse a probar cosas nuevas.

Decir que el tinto va con la carne y el blanco con el pescado o que los de uva garnacha son más dulces que los tempranillos es ya una lectura obsoleta sobre el vino. Los expertos, como el sumiller Jesús Solanas, lo tienen claro: con el vino no se puede simplificar.

Copas de vino.Pixabay

Esto, para los menos duchos en la materia, es algo que dificulta el proceso de elección del vino perfecto para las navidades. En esta época, incluso en este año raro, es el producto estrella. Ya sea como regalo o para regar las viandas de las numerosas reuniones familiares, no hay mesa que no esté repleta de botellas estos días.

Pero antes de hablar sobre cómo escoger el vino perfecto conviene puntualizar que no hay uno o varios concretos. La clave está en seleccionar el más adecuado para cada ocasión. Si se trata de una comida o cena, factores como el número de comensales o el menú que se va a comer afectarán en la decisión. Si es como regalo, entran en juego el presupuesto y la popularidad del vino.

Denominaciones de origen, año de la cosecha, conservación en barrica, tipo de uva… Los factores que influyen en el proceso de producción vinícola son muchos y no todos los consumidores de vino, especialmente los menos asiduos, saben cómo interpretarlos. Antes de pasar con las recomendaciones del sumiller Jesús Solanas, una declaración inicial: “En toda comida importante el vino tiene que tener un lugar destacado, pero no debemos preocuparnos ni obsesionarnos sobre si vamos a ser capaces de elegir uno bueno”.

Teniendo esto en cuenta, a continuación, cinco consejos para elegir un buen vino estas navidades.

1. Dejarse asesorar y comprar en bodegas o tiendas especializadas


Para aquellos que no son expertos en el mundo del vino, el primer consejo que Solanas da es que se dejen asesorar por profesionales. A menudo esto es más factible en tiendas especializadas, con personas expertas que pueden recomendar el mejor producto, el más acorde a lo que el cliente necesita. “Es mucho más recomendable recurrir al pequeño comercio que a las grandes superficies, donde habitualmente no hay personal formado que nos pueda atender”, explica.

La venta directa en bodegas o en restaurantes, donde también se pueden adquirir botellas de vino, son otras alternativas recomendadas frente a la compra en supermercados.

2. No tenerle miedo al vino y atreverse con cosas nuevas


“Para saber de vinos lo primero que hay que hacer es beber vino y no tenerle miedo”, dice Solanas. El sumiller defiende que no es necesario ser un experto ni haber hecho cursos o catas para poder disfrutar. “Todos sabemos lo que nos gusta y lo que no y cuando probamos un vino tiene que aportarnos sensaciones placenteras”, añade.

A quienes ya están más familiarizados con el mundillo les recomienda atreverse a probar cosas nuevas. “Para desarrollar el sentido del gusto es necesario salir de la rutina, optar por diferentes uvas, otras denominaciones de origen y zonas… Arriesgarse con nuevos vinos”, asegura. Y es que, en este caso, en la variedad también está el gusto. “Si no variamos, nunca aprenderemos. Cuanto más probemos, más exigentes podremos ser y contribuiremos, además, a que la calidad general de nuestros vinos aumente”, explica.

3. Las grandes ocasiones merecen varios vinos sobre la mesa


Por muy bueno que sea un vino, toda una comida especial, como las de estas fechas, no puede ir acompañada de uno solo. “Hay que introducir variedad no solo de vinos, sino de otras bebidas también”, asegura Solanas, quien recomienda pensar más allá del tinto y del blanco. “No debemos olvidarnos de los espumosos, que también los hay rosados. También están los de aperitivo, como los vermuts, los aromatizados o los semidulces, y los vinos dulces”, enumera.

Junto a la recomendación de tener variedad de vinos para una comida o cena de Navidad, Solanas aconseja que haya coherencia en la selección, es decir, que todos los escogidos sean de un mismo rango de calidad y precio.

4. Dejarse guiar por el precio y no escatimar


Según la experiencia de este sumiller, cuando un vino tiene un precio alto es porque lo vale. “La gente del vino, por norma general, es honesta”, apunta. Así, su recomendación es no escatimar a la hora de escoger y no dejar que el precio nos frene. Aunque no se atreve a dar la cifra que para él sería pagable, invita, más en estas fechas, a gastarse dinero.

Además, aquí entra en juego la rentabilidad de la actividad vinícola. “Tenemos que acostumbrarnos a pagar ciertos precios no solo por la calidad del vino, sino también para sustentar el negocio”, asegura, proponiendo al cliente que piense cuánto le queda al agricultor de la venta de un vino a un precio muy barato.

5. Tener en cuenta el menú y el número de comensales


A la hora de escoger el vino para una celebración, es importante tener en cuenta de qué va a estar compuesto el menú. Atrás quedó lo del vino tinto para la carne y el blanco para el pescado. El maridaje, ese proceso que consiste en emparejar un alimento con un vino, es todo un mundo en el que intervienen factores como la intensidad de los sabores, si son platos con salsa o sin ella, la temperatura, el aderezo o la cantidad.

También hay que tener claro qué se quiere conseguir con la combinación entre alimentos y vino. Si el objetivo es ensalzar la comida y que el vino acompañe, se debe optar por uno que no eclipse al plato. En cambio, si lo que se quiere es abrir esa botella guardada desde hace tiempo para una ocasión especial, el menú deberá contener sabores de baja intensidad, para poder disfrutar del vino.

“En estas fechas de reuniones familiares, lo más habitual es escoger primero la comida y, en función de ella, el vino”, explica Solanas. Aquí habrá que tener en cuenta el número de comensales, así como sus preferencias y su relación con el vino. “Si hay muchas personas en la mesa, con gustos variados, es mejor no arriesgar. A veces, las circunstancias están por encima del vino”, reconoce.

LUCÍA VALERO

Fuente: Heraldo.es

No hay comentarios. :