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Desde diciembre de 2007, en Maracaibo, fabricando desde casa, José Antúnez y Ziamira Mora, crearon una pastelería fina, con repostería artística, que tuvo una distinción particular, propia
Los emprendimientos familiares suelen ser exitosos. Por alguna razón las piezas encajan y la fórmula es exitosa. Todo depende de la disciplina, el talento y la planificación.
Desde diciembre de 2007, en Maracaibo, fabricando desde casa, José Antúnez y Ziamira Mora, crearon una pastelería fina, con repostería artística, que tuvo una distinción particular, propia.
Catorce años después, esa fórmula marca pauta en Santiago de Chile, dónde este matrimonio destaca con @Moritasbakery.cl, enfocados en el rubro de la pastelería artística y los minidulces, especialmente para eventos y celebraciones de todo tipo.
En la capital zuliana fueron referencia en la elaboración de pasteles de bodas y fiestas de 15 años, logrando ser proveedores de las más grandes celebraciones y eventos de la ciudad.
“Por situación país en abril de 2018 emigramos a Chile y durante un año y medio trabajamos desde casa, con pasteles artístico y en crema“, cuenta Ziamira, quien destaca que la mayoría de sus primeros pedidos eran de venezolanos que ya habían sido sus clientes y para quienes, de cierta manera, resultó un alivio saber que estaban aquí.
Sin embargo, estábamos seguros que era importante incluir en nuestro mercado al cliente chileno. Esto no fue fácil, el chileno tiene otro gusto en la pastelería y su cultura en cuanto a pasteles para eventos es mucho mas sencilla que la que nosotros trabajamos, por lo que nos vimos obligados fusionar sus gustos y nuestro talento, fabricando pasteles en crema con sabores chilenos y un toque venezolano, con el plus de una linda presentación”, explica.
Con esta línea, pastelería chilena con un toque venezolano, dedicación y esfuerzo, empezaron a gestarse resultados y en diciembre de 2019, el matrimonio abrió su primer local comercial en Manuel Mont 2120, Providencia, donde ofrecen pasteles en crema porción, enteros y a pedido (por pedidos se incluyen pasteles en crema, artísticos, sin azúcar, veganos y sin lactosa).
Hoy, junto con un excelente equipo, y pese a la pandemia, siguen en pie y hacia adelante adaptándose a las circunstancias que se van presentando. “Lo hacemos porque somos apasionados y profesionales en este dulce mundo que es la pastelería”, sentencia.
Fuente: Versión Final
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